Entrevista a Juan Fernández Del toro, autor del libro "La torre del reloj de Mula".

La Torre del reloj de Mula es considerada como una de las torres civiles más importantes de la Región de Murcia, data del 1806, aunque con anterioridad, en su misma ubicación hubo una primera torre que databa del siglo XVI y otra del siglo XVII.

Juan Fernández del Toro (Mula, 1990) es Arquitecto Técnico, Ingeniero de Edificación y Máster en Patrimonio Arquitectónico por la Universidad Politécncia de Cartagena. Ha escrito un libro sobre esta torre que será presentado el día 28 de enero a las 12 h, en el convento de San Francisco “museo Ciudad de Mula”.

Juan Fernández, ha realizado diversos trabajos de investigación publicados en revistas y congresos, siendo sus principales objetos de estudio el Heredamiento de Aguas, las murallas medievales, la carpintería histórica, el Casino (junto a José Antonio Zapata Parra), entre otros edificios muleños, o los pavimentos Nolla de la Casa-Museo Don Pepe Marsilla de Bullas (junto a Antonio Párraga Ruiz).

En 2016 ganó una beca de investigación en la Universidad Politécnica de Cartagena con la que desarrolló un trabajo sobre el Paisaje Cultural en el entorno de las villas modernistas del Campo de Cartagena.

Recientemente le ha sido concedido el 3º premio de Trabajos Final de Máster otorgado por el Colegio Oficial de Aparejadores, Arquitectos Técnicos e Ingenieros de Edificación de la Región de Murcia (COAATIEMU), por su trabajo "Las murallas medievales de Mula. Análisis integral y propuesta de restauración de la muralla del albacar".

En la actualidad, desarrolla la profesión de Arquitecto Técnico en el Ayuntamiento de Mula.

1- ¿Cómo surgió la idea de escribir este libro?

Durante el desarrollo de la asignatura "Historia de la Arquitectura y de la Construcción" del Máster en Patrimonio Arquitectónico, elegí la Torre del Reloj como objeto de estudio para un trabajo de clase, pues en investigaciones anteriores sobre otros edificos había localizado en el Archivo Municipal información interesante del reloj. Dada la gran cantidad de datos hallados y lo interesante que me resultó, decidí continuar investigando después de finalizar aquel trabajo, que acabó siendo un pequeño resumen de lo que ha resultado el libro.

Siendo conocedores del trabajo que estaba desarrollando, recibí la invitación de José Antonio Zapata y Juan Guillén, coordinadores de los "Cuadernos de Patrimonio Cultural de Mula", para publicar este libro editado por el Ayuntamiento de Mula.

2- ¿Cuánto tiempo le llevó la elaboración del libro?

He estado trabajando en este proyecto más de dos años, con mayor o menor dedicación en cada momento.

3- ¿A quién va dirigida la obra?

A todas aquellas personas que quieran conocer un poco más de nuestra historia, en concreto de la Torre del Reloj, que ha sido vital para la villa de Mula, independientemente de los conocimientos en materia de historia o arquitectura, pues no son necesarios para seguir el hilo del libro.

4- ¿Cuál ha sido la mayor dificultad con la que se ha encontrado a la hora de su realización?

Recopilar toda la información histórica de archivo, puesto que he tenido que consultar distintos fondos del Archivo Municipal de Mula. Quizás la tarea más ardua fue consultar todas las actas capitulares del Condejo desde 1523 hasta los años noventa del siglo XX. Casi cinco siglos de acuerdos municipales, con lo que implica entender la caligrafía de las épocas más antiguas para una persona sin formación en paleografía como yo, pues no soy historiador. En esa tarea he de agredecer la inestimable ayuda de los archiveros municipales Antonio Gabarrón y José Boluda.

5- ¿Qué aporta "La Torre del Reloj de Mula"?

Hasta la fecha, no se había realizado un estudio pormenorizado de esta construcción histórica, solo existían breves reseñas en diversas publicaciones. Por tanto, "La Torre del Reloj de Mula" viene a cubrir esa laguna en la bibliografía muleña, recogiendo toda la historia del reloj desde su aparición a comienzos del siglo XVI: las distintas torres que han existido, la construcción de la actual, las máquinas que en ella se han instalado, los fieles del reloj que se dedicaron a su cuidado, etc.

6- ¿Qué destacarías del libro?

Si bien estoy muy contento con el resultado de la parte dedicada al desarrollo histórico del reloj y de la construcción de la torre actual, quizás destacaría el apartado dedicado a los encargados del reloj desde 1524 hasta 1991, donde hablo más detenidamente de los últimos relojeros. Y digo que destacaría esta parte porque he podido hablar con algunos de los encargados o sus familiares, por lo que he recogido información que podría haberse perdido de no haberlo hecho ahora, pues se trata de testimios orales. Los papeles del Archivo Muncipal estarán ahí por mucho tiempo, esperemos que por siempre, pero no así las vivencias de la gente.

7- ¿Crees que los vecinos de Mula saben de la importancia histórica de la torre del reloj?

En absoluto. La torre del reloj ha sido una de las construcciones más importantes para Mula, por tratarse de una población eminentemente agrícola y por la peculiaridad del agua en ella. A modo de anécdota, puedo decir que han sido varias las personas que, al enterarse de que estaba realizando esta investigación, me han dicho que el reloj se construyó para representar al poder civil frente al religioso que ostenta el campanario de San Miguel. Nada más lejos de la realidad, la Torre del Reloj tiene una razón de existir, que poco tiene que ver con ese tipo de vanalidades.

8- ¿Seguirás escribiendo e investigando sobre edificios históricos muleños?

Por supuesto, es algo que me encanta. Tengo la conservación y difusión del patrimonio histórico como vocación profesional, pero también como hobby, pues dedico parte de mi tiempo libre a investigar.

9- ¿Cuáles serán los próximos?

Hace unos días recibía la aceptación en un congreso que se celebrará en Burgos, el próximo mes de junio, donde trataré sobre los esgrafiados barrocos de Mula. Además, estoy barajando las posibilidades en cuanto a temática para comenzar la tesis doctoral que, por supuesto, tratará sobre patrimonio histórico muleño, pues mi objetivo es aportar todo lo posible a la puesta en valor de nuestro maravilloso Conjunto Histórico.